Twitter, la compañía creada por Jack Dorsey y con sede en California es una empresa con un increíble auge hoy en día gracias a las funciones de su red social. Dicha red, famosa por su microblogging, permite a sus usuarios transcribir mensajes cortos y concisos con un máximo de 140 caracteres en ellos y hacerles llegar estos a todos los seguidores de una determinada persona a través de un ´TimeLine´.
De esta manera, son miles de artistas y figuras públicas los que procedieron en su momento a crearse una cuenta en dicha red social, para así, lograr una mejor interacción con sus seguidores y con toda la comunidad internauta. Sin embargo, son múltiples las razones por las cuales muchos éstos han cerrado sus cuentas personales dentro de la red social.
El más reciente de esto ha sido el cantante Ed Sheeran; hace algunas semanas el cantante británico mencionó que se alejaría de twitter y dejaría de revisar las menciones que realizaban los usuarios en la red social, esto debido a alegar que estaba cansado de los ataques que realizaban las personas a través de este medio.
Consecuentemente, luego del estreno de la séptima temporada de la serie Game Of Thrones, el cantante borró su cuenta. Los medios y personas más cercanas al artista mencionaron que ha sido por la masiva cantidad de críticas que recibó luego de su veloz aparición en la famosa serie, al parecer Ed Sheeran se cansó de los comentarios negativos.
También ocurrió con la artista Demi Lovato, quien cerró su cuenta 24 horas debido a una lluvia de memes que recibió por algunas fotos publicadas, fotos que cruelmente fueron retwitteadas por Ariana Grande y Mariah Carey; la pobre Demi no se salvó del bullying.
Caso radicalmente distinto el de Azalia Banks, persona a la que fue cerrada su cuenta durante 8 días debido a ataques racistas que twitteó hacía Zayn Malik.
Iggy Azalea también sufrió las consecuencias de la cercanía con sus seguidores, y durante un mes cerró su cuenta debido a las multiples críticas realizadas mediante memes por su trasero; y muy lejos de este caso no estuvo el de Sam Smith, quien luego de ganar un Oscar sintió el poder de los trolls de Twitter, quienes lo criticaron por sus declaraciones al recibir dicho premio.
Como estos, hay más casos de figuras públicas quienes han decidido cerrar temporal o permanentemente esta red social; y es que la misma, se convierte en un arma de doble filo si no es usada cuidadosamente.
Las redes sociales lograron acortar el espacio entre los fanes y sus ídolos, trayendo consigo la confianza de poder criticarlos y hasta ridicularizarlos si estos se lo permiten.
Para muchos de los artistas, les resulta incómodo el acceso que tiene el usuario común hacía su vida personal y es por eso que algunos han optado por encargar personas especializadas en el manejo de sus redes sociales.
Acerca de esto, escribió el profesor de Televisión y Cultura Popular de la Universidad de Siracusa Robert Thompson, quien expresó “muchos famosos se están dando cuenta de que la familiaridad lleva al exceso de confianza, solíamos pensar que los famosos eran gente distante con la que no podíamos comunicarnos nunca.
Twitter cambió eso y algunos famosos se están cansando”. Aunque con esto no queremos decir que son únicamente los fanes quiénes se encargan de poner en ridículo a los artistas, muchos cierres también ocurren por peleas e intercambios de mensajes entre las mismas celebridades.
Twitter ha sido una herramienta de internet que ha logrado el ascenso y reconocimiento de cientos de personas, pero también el descenso o la crítica de muchos otros famosos por un mal manejo de la misma, y estos últimos nos han enseñado lo poderosa que puede ser la palabra cuando es redactada en un medio masivo como este.